lunes, 5 de mayo de 2008

Dos festejos marcan aún más la división del PRD en su aniversario

Enrique Méndez y Alma E. Muñoz
El Partido de la Revolución Democrática (PRD) llega hoy dividido a su 19 aniversario y, a diferencia de años anteriores, esta vez no habrá celebración oficial, ante la falta de una dirigencia nacional electa. Los dos principales candidatos, Jesús Ortega Martínez y Alejandro Encinas Rodríguez, encabezarán por separado sus propios “festejos”.
Mientras Ortega invitó esta mañana a una concentración en el Monumento a la Revolución, con la presencia de artistas como el grupo de rock Qué Payasos y la Sonora Santanera, Encinas convocó al mediodía a un encuentro en la Expo Morelos.
Guadalupe Acosta Naranjo y Martha Dalia Gastélum, declarados ayer presidente y secretaria general sustitutos por Nueva Izquierda (NI) y Alternativa Democrática Nacional (ADN), anunciaron su presencia en el acto de Ortega, con el propósito de convocar desde ahí a la unidad del partido.
En un comunicado para convocar al encuentro de hoy, Jesús Ortega aseguró que ahí se refrendará la decisión de que el PRD se mantenga en la defensa del petróleo. “Haremos nuevamente extensiva nuestra determinación de luchar en contra de la privatización de Petróleos Mexicanos (Pemex) y nuestra convicción de que ese patrimonio energético tan importante debe estar al servicio de la nación, no al de empresas extranjeras o de particulares”, aseguró.
Por su parte, en conferencia de prensa, Encinas declaró que la parte central de su discurso consistirá en una reflexión sobre el estatus del partido y en dar una respuesta más contundente a las decisiones tomadas ayer por Nueva Izquierda en el Consejo Nacional del PRD.
Explicó que el “festejo” que encabezará tendrá un costo de 42 mil pesos, por la renta del salón y las sillas, principalmente, y “no va a haber Sonora Dinamita ni Sonora Santanera”.
Interrogado sobre si se invitó a personajes como Cuauhtémoc Cárdenas y Andrés López Obrador, aseguró que la convocatoria fue amplia. Consideró que el 19 aniversario del PRD se da en un momento paradójico: es la segunda fuerza política nacional, pero se encuentra en su mayor conflicto interno.
También afirmó que el sol azteca “no es patrimonio de sus dirigentes, sino de la izquierda y del movimiento democrático. No tiene por qué disolverse a partir de un conflicto por una burocracia que quiere ganar la elección. El llamado a un partido fuerte no debe ser divorcio pactado, sino abrirlo a otras expresiones de la izquierda, que nos permita volver a ganar la presidencia en 2012”.
Por la mañana, el coordinador de los diputados perredistas, Javier González Garza, afirmó frente a la disputa que se espera en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, que la elección del 16 de marzo “está anulada, nomás que no se han querido dar cuenta”.

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