El coordinador de los diputados federales del PRD, Javier González Garza, dijo que es muy difícil suponer que Jesús Ortega o Alejandro Encinas ocupen la presidencia nacional del partido luego del proceso interno. “Quién sabe después, pero en esta elección, no”, subrayó.
Agregó que se han polarizado las cosas y hay acusaciones de tales magnitudes entre las dos corrientes en disputa que “no creo que esto pueda tener un buen final”.
El legislador estimó que en algún momento tendrá que haber un acuerdo entre los dos grupos enfrentados, cuyos candidatos han dicho que están dispuestos a hacer un congreso para cambiar las reglas, y los dos han aceptado la palabra refundación. Si eso es así, entonces hay que nombrar a un interino hasta que se haga el congreso, puntualizó.
Asimismo, consideró que en estos momentos el PRD enfrenta varias posibilidades. Por un lado, el tribunal electoral o la Comisión Nacional de Garantías pueden anular los comicios de marzo pasado si encuentran irregularidades en más de 20 por ciento de las casillas, y por otro, las corrientes podrían llegar a un convenio y a la renuncia de los candidatos, con lo que se acabaría la litis. De hecho, refirió que ha habido acercamientos entre representantes de las dos expresiones.
González Garza criticó los comicios de hace dos meses. “Fue un proceso malo, en el que se demostró que el partido llegó a un cierto límite y que no puede hacer elecciones internas”.
Por lo que se refiere al fallo de la Comisión Nacional de Garantías que valida la sesión del Consejo Nacional en que se nombró a Guadalupe Acosta Naranjo como presidente provisional del PRD, expuso que nada tiene que ver con las impugnaciones al proceso electoral de hace dos meses.
Agregó que se han polarizado las cosas y hay acusaciones de tales magnitudes entre las dos corrientes en disputa que “no creo que esto pueda tener un buen final”.
El legislador estimó que en algún momento tendrá que haber un acuerdo entre los dos grupos enfrentados, cuyos candidatos han dicho que están dispuestos a hacer un congreso para cambiar las reglas, y los dos han aceptado la palabra refundación. Si eso es así, entonces hay que nombrar a un interino hasta que se haga el congreso, puntualizó.
Asimismo, consideró que en estos momentos el PRD enfrenta varias posibilidades. Por un lado, el tribunal electoral o la Comisión Nacional de Garantías pueden anular los comicios de marzo pasado si encuentran irregularidades en más de 20 por ciento de las casillas, y por otro, las corrientes podrían llegar a un convenio y a la renuncia de los candidatos, con lo que se acabaría la litis. De hecho, refirió que ha habido acercamientos entre representantes de las dos expresiones.
González Garza criticó los comicios de hace dos meses. “Fue un proceso malo, en el que se demostró que el partido llegó a un cierto límite y que no puede hacer elecciones internas”.
Por lo que se refiere al fallo de la Comisión Nacional de Garantías que valida la sesión del Consejo Nacional en que se nombró a Guadalupe Acosta Naranjo como presidente provisional del PRD, expuso que nada tiene que ver con las impugnaciones al proceso electoral de hace dos meses.
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